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El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció el 4/3 los nuevos cargos que terminan de conformar el gabinete de su segundo mandato en la Casa Blanca. En una ceremonia en el Salón Este de la Casa Blanca, Obama nombró a Sylvia Mathews Burwell, hasta ahora presidenta de la Fundación Walmart, para liderar la Oficina de Presupuesto de Casa Blanca. “Sylvia sabe cómo ajustar un presupuesto”, dijo. Burwell fue jefa de gabinete del Secretario del Tesoro en los ‘90, subdirectora de la Oficina de Presupuesto durante la presidencia de Bill Clinton, así como impulsora del Programa de Desarrollo Global de la Fundación Gates, convirtiendo la institución en “una fuerza del bien mundial”, en palabras de Obama.​

 

 

 

El nombramiento de Burwell al frente del presupuesto de la Casa Blanca coincide con el brutal ajuste que significa la entrada en vigor de importantes recortes al presupuesto federal, una reducción de 85.000 millones de dólares en el próximo año -y un total de 1,2 billones de dólares a lo largo de la próxima década. “Sé que Silvia hará todo lo que esté en su poder para evitar el impacto de estos recursos en empresas y en familias de clase media”, insistió Obama. “Pero antes o después, muchísimos ciudadanos van a sufrir y por eso debemos seguir trabajando para reducir el déficit de una manera equilibrada. El presidente afirmó haber elegido “a la persona más adecuada” para continuar ese trabajo.

Y efectivamente es así: nadie mejor que funcionarios de WalMart para aplicar un brutal ajuste y atacar las condiciones de vida de los trabajadores y el pueblo de EE.UU. Como lo afirmamos en el capítulo II de El Fin de las Multinacionales: “Sin dudas el ideal de modelo económico al que aspiran los gobiernos capitalistas, lo constituye un frente del que hacen parte tanto la multinacional Wal- Mart como el estado Chino, que van a la vanguardia en la superexplotación obrera, la precarización laboral, los bajos salarios y la eliminación de los derechos democráticos más elementales”.

 

 

          Esta es la verdadera razón por la que Obama, presidente del principal gobierno capitalista del mundo, ha llevado a WalMart a la oficina de presupuesto de ministerio de economía más grande del mundo, para ajustar al presupuesto más grande del mundo, y llevar adelante lo que sin duda será el plan de ajuste más grande del mundo.

  

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